Albóndigas de soja texturizada a la marinera

La albóndigas de pescado son deliciosas, pero en las recetas tradicionales no resulta tan sencillo conseguir una textura firme sin usar una gran cantidad de pan remojado en leche. ¡Pues eso se acabó! Hoy, os proponemos una alternativa fantástica elaborada con soja texturizada que vamos a  hidratar en fumet de pescado. Esto, además de proporcionarnos la textura esponjosa perfecta que buscamos,  elevará los matices y los sabores al máximo.

Como hemos visto en otras ocasiones, la soja texturizada es mucho más que una alternativa a la carne en salas y guisos. Su textura versátil y sabor la convierten en una opción perfecta para aportar consistencia a muchas preparaciones. Además, nos aporta proteínas, hierro y fibra y, en este plato, nos permite sustituir los carbohidratos del pan. Otra característica  importante: nos permite elaborar unas albóndigas sin gluten.

Si tienes tiempo, puedes preparar tu propio fumet con espinas y cabezas de pescado, aunque resulta muy sencillo encontrarlo ya preparado en muchas tiendas. Una parte del fumet lo utilizaremos para las albóndigas y el resto lo reduciremos a fuego lento, para crear una deliciosa salsa que, junto a unas gambas y unas almejas, culminará este delicioso plato con aires marineros.

Receta de Albóndigas de soja texturizada a la marinera

  • 45 min
  • Dificultad media
  • 4 comensales

Ingredientes

250g pescado blanco (merluza, bacalao..)

75g soja texturizada

1l fumet de pescado

2 yemas de huevo

1 Ajo

Perejil

Harina (puede ser de trigo o arroz)

1/2 cebolla

1 chorrito de vino blanco (opcional)

2 cucharadas de maicena

Gambas

Almejas

Elaboración

1
Hidratamos la soja texturizada con el fumet a cubrir durante unos minutos.
2
En un procesador, incorporamos la soja ya hidratada, el pescado, las yemas de huevo, ajo y perejil al gusto. Picamos todo hasta conseguir una textura uniforme.
3
Creamos las albóndigas dándoles forma redonda con las manos y pasándolas por harina para evitar que se peguen.
4
A continuación, las freímos con un poco de aceite hasta que queden doradas por todos los lados. Reservamos.
5
En una sartén o cazuela baja, doramos la cebolla picada muy fina; después, añadimos un buen chorro de vino blanco y dejamos un par de minutos que evapore.
6
Disolvemos la maicena en una pequeña parte del fumet de pescado y lo incorporamos junto con el resto a la cazuela. Dejamos reducir unos 10 minutos o hasta que empiece a espesar
7
Por último, incorporamos las albóndigas, las almejas y las gambas a la salsa y dejaremos cocinar a fuego bajo con la tapa puesta hasta que se abran las almejas y las gambas se haya cocinado.