Crema de garbanzos con bacalao y espinacas

El Potaje de Vigilia es una receta con garbanzos que se prepara tradicionalmente en nuestro país durante la Cuaresma y Semana Santa. Por eso, a diferencia de otros platos de cuchara, lleva bacalao en vez de carne y se suele acompañar con espinacas y huevo duro. La receta de por sí es deliciosa pero, como nos gusta innovar y proponeros cosas diferentes, hoy os proponemos una versión con una crema de garbanzos que, aunque con una textura más suave y fina, nos regala los mismos sabores de siempre.

Para darle un extra de sabor, coceremos los garbanzos en caldo vegetal en vez de agua, junto con unas hojas de laurel. Terminaremos la crema con unas lascas de bacalao y unas espinacas ligeramente cocinadas, también añadiremos cuatro garbanzos para aportar crujiente y un toque de cebollino. Una forma de presentación diferente y elegante que hará quedar como los mejores anfitriones.

Receta de Crema de garbanzos con bacalao y espinacas

  • 45 min
  • Dificultad baja
  • 4 comensales

Ingredientes

300g Garbanzo Origen Luengo

1 cebolla grande

Caldo vegetal

2 hojas de laurel

Para los toppings:

1 lomo de bacalao desalado (unos 300g)

1 manojo de espinacas

Cebollino

Elaboración

1
Remojamos los garbanzos el día anterior.
2
Rehogamos la cebolla en una cazuela con aceite hasta que coja color, añadimos los garbanzos escurridos, caldo hasta cubrirlos y las hojas de laurel. Cocinamos en olla exprés o convencional según indicaciones del paquete.
3
Retiramos el laurel y trituramos la crema hasta que quede una textura suave. Añadimos más caldo si hace falta y rectificamos de sal.
4
Cocinamos el bacalao y las espinacas al vapor unos 8 minutos y reservamos.
5
Servimos la crema con unas lascas de bacalao por encima, unas hojas de espinacas y algunos garbanzos cocidos que habremos reservado. Acabamos con un chorrito de aceite de oliva y cebollino picado.