La pardina se llama así por ser oscura y de menor tamaño que otras lentejas. Tiene una piel muy suave y no se deshace al cocinarla, y eso no es lo mejor: su sabor es exquisito. En otras palabras: pequeña por fuera y grande por dentro.
La pardina se llama así por ser oscura y de menor tamaño que otras lentejas. Tiene una piel muy suave y no se deshace al cocinarla, y eso no es lo mejor: su sabor es exquisito. En otras palabras: pequeña por fuera y grande por dentro.