Ensaladilla rusa con garbanzos

Cuando el calor aprieta, buscamos platos frescos, sencillos y sabrosos que podamos dejar listos con antelación. Esta ensaladilla rusa con garbanzos nos proporciona eso: una versión veraniega y más nutritiva de la receta clásica, y resulta perfecta para una comida ligera o una cena informal en la terraza. Cambiamos la tradicional base de patata por una mezcla donde los garbanzos cocidos toman protagonismo, aportando cremosidad y un extra de proteína vegetal. La mezcla con zanahoria, huevo y atún mantiene el espíritu de la receta original, pero con un giro que la hace más interesante y nos va a saciar más.

Servida fría y coronada con pimiento rojo asado, piparras y cebollino, es de esos platos que no necesitan mucho más. Acompañada de un pan crujiente, puede convertirse en un imprescindible de la temporada. Además, es muy fácil de preparar y admite variaciones según lo que tengamos en la nevera. Ideal para llevar a la playa, al campo o disfrutar en casa sin complicaciones.

Receta de Ensaladilla rusa con garbanzos

  • 30 min
  • Dificultad baja
  • 2 comensales

Ingredientes

200 gramos de garbanzos cocidos Luengo

1 Zanahoria (150 gr)

1 patata (150 gr)

130 gramos de atún en aceite de oliva o al natural

2 huevos

3 cucharadas de mayonesa

Pimiento rojo asado

Piparras

1 cucharada de cebollino picado

Sal y pimienta de molinillo

Elaboración

1
Cocemos los huevos, los dejamos enfriar y reservamos.
2
Cocemos también las patatas y las zanahorias. Una vez frías, las cortamos en cubos pequeños.
3
En un bol, aplastamos los garbanzos Luengo con un tenedor hasta obtener una textura rústica.
4
Añadimos el huevo picado, la patata, la zanahoria, el atún escurrido, la mayonesa, sal y pimienta al gusto. Mezclamos bien.
5
Montamos la ensaladilla en forma de torre y decoramos con unos trozos de atún, pimiento rojo asado, piparras, cebollino picado y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
6
Servimos fría acompañada con unas tostadas.