Cuando el calor aprieta, buscamos platos frescos, sencillos y sabrosos que podamos dejar listos con antelación. Esta ensaladilla rusa con garbanzos nos proporciona eso: una versión veraniega y más nutritiva de la receta clásica, y resulta perfecta para una comida ligera o una cena informal en la terraza. Cambiamos la tradicional base de patata por una mezcla donde los garbanzos cocidos toman protagonismo, aportando cremosidad y un extra de proteína vegetal. La mezcla con zanahoria, huevo y atún mantiene el espíritu de la receta original, pero con un giro que la hace más interesante y nos va a saciar más.
Servida fría y coronada con pimiento rojo asado, piparras y cebollino, es de esos platos que no necesitan mucho más. Acompañada de un pan crujiente, puede convertirse en un imprescindible de la temporada. Además, es muy fácil de preparar y admite variaciones según lo que tengamos en la nevera. Ideal para llevar a la playa, al campo o disfrutar en casa sin complicaciones.
Receta de Ensaladilla rusa con garbanzos
- 30 min
- Dificultad baja
- 2 comensales

Ingredientes
200 gramos de garbanzos cocidos Luengo
1 Zanahoria (150 gr)
1 patata (150 gr)
130 gramos de atún en aceite de oliva o al natural
2 huevos
3 cucharadas de mayonesa
Pimiento rojo asado
Piparras
1 cucharada de cebollino picado
Sal y pimienta de molinillo